martes, 16 de mayo de 2017

Guardianes de la Galaxia

¿Alguna vez os habéis planteado que fuera de nuestro planeta pueda haber seres malvados que intenten destruirlo pero haya otros seres maravillosos que se lo impidan y no nos hayamos enterado? ¡Qué feliz es la ignorancia, ¿eh?!

Pues algo parecido sucede en esta película de la factoría Marvel, estrenada en 2014, y basada en los cómics homónimos de dicha factoría.


La historia comienza con un pequeño Peter Quill escuchando música en un hospital, esperando ver morir a su madre. Antes de que esta lo haga, le entrega una carta y una cinta y le habla de su padre. Tras su fallecimiento, Peter sale del hospital corriendo desesperadamente y es abducido por una nave que parece que le estaba esperando. ¿Qué digo parece? ¡¡¡Le estaba esperando!!!

Pues bien, 26 años después es cuando se desarrolla la trama real de la peli. En la primera escena podemos ver a un Peter Quill ya con 35 palos que aún siente mucho apego por su madre ya que sigue escuchando la misma cinta que escuchaba el día en que ella fallece... Peter, ¡¡supéralo!! Es un consejo... Eso sí, nos sirve para verle bailando por un planeta inhabitado y en el que se marca un movimiento de caderas muy sensual que no dejaría indiferente a ninguna chica (ejem, ejem). ¿Que qué hace en ese planeta inhabitado? Ligar no, desde luego, a pesar de que es un saco de hormonas efervescentes. Ha ido en busca de un orbe que no sabe lo que contiene, pero lo terminará descubriendo tarde o temprano. Pero cuando lo consigue, se encuentra con una sorpresita: no está solo. Los secuaces de Ronan (el malo malvado que me recuerda, sin ofender, a Darth Vader y Thor) le acorralan y le piden que se lo dé. Sin embargo, no les será fácil capturar a Peter/Star-Lord y el orbe, ya que nuestro querido protagonista tiene más juguetitos que McGyver y consigue escapar de allí ileso.




En su huida, recibe una llamada de un tal Yondu, quien descubrimos que es es el que 26 años antes le abdujo en la puerta del hospital donde su madre murió y que es un saqueador. Bien, Yondu va a buscar el orbe y descubre que ya se lo ha llevado Peter. Por eso le llama. Como sospecha que se la va a jugar, le pone precio a su cabeza, pero unida a su cuerpo, para conseguir localizarle: 40.000 unidades.

Entretanto, los secuaces de Darthor, digo Ronan, le informan del fracaso de su misión y quién ha sido el responsable. Por ello, le encarga la misión de encontrar a Starlord a Nébula, una de las hijas de Thanos (el superior de Ronan); pero Gamora, otra de las supuestas hijas de Thanos, interviene para ganarse la confianza de Ronan y ser ella quien vaya en busca de Starlord. Acaba convenciéndole para ir ella. Lo que él no se imagina es que ella no piensa volver a él con el orbe.

Ahora es cuando conocemos a Rocket, un mapache modificado genéticamente y reconstruido, y a Groot, un árbol humanoide que solo sabe decir tres palabras: "yo", "soy", "Groot" y que al final de la historia nos sorprenderá diciendo una más. Estos personajes son cazarrecompensas que viven en un planeta llamado Xándar. Y mira tú por dónde, descubren a Peter y que su precio es de 40 mil unidades (se les hacen los ojos chiribitas). Así que deciden ir a capturarle, pero antes de que esto suceda, el buscado intenta hacer negocios con el hombre a quien Yondu pretendía venderle el orbe. Sin embargo, cuando este hombre se entera de que Ronan también está interesado en el artilugio decide olvidarse de él y echar a Peter de su establecimiento sin ningún miramiento. Es aquí donde Gamora espera a Peter, entablan una corta conversación y le acaba robando el orbe al ingenuo de él, que ya ha sentido algo por ella (y no es asco, precisamente). Comienza aquí una lucha entre ellos dos a la que se unen Rocket y Groot. Pero acaban todos en la cárcel. ¿Por qué y cómo? Pues detenidos por vandalismo, digo yo, ¿no?

Es en esta escena donde las féminas nos percatamos de que Star-Lord/ Peter/ Chris Pratt (que vienen a ser el mismo) no solo es guapo de los que rompen el espejo sino que, además, está... Bueno, ¡cómo está! Pues como para ir a comer con él o a cenar, porque todos sabemos que después pueden surgir diversos y variados planes a los que, por supuesto, no nos vamos a negar. ¿Verdad que no, chicas?



En fin, después de este inciso espontáneo, continuemos con nuestro cometido. Y hablando de espontaneidad, durante su paso por la cárcel conocen al último miembro del grupo, Drax, cuyo único fin en la vida es dar muerte a Ronan porque él asesinó a su familia sin ningún miramiento. Y, mira tú por dónde, va a conocer a Gamora, familiar de su querido odiado. Tratará de matarla, pero Peter se lo impedirá y le invitará a unirse a ellos. Gracias a un plan de Rocket, se fugarán de la cárcel. ¿Cuál es ese plan? Si te lo cuento, no verás la peli y eso es justo lo que quiero que hagas.











Acto seguido, se dirigen a la morada del comprador del orbe con quien Gamora habló. Mientras le esperan, se va observando una pequeñísima evolución de los personajes que, a mí, personalmente, me encanta ya que no se muestran tan fríos y distantes entre sí. Cuando conocen al comprador, este les explica por qué hay tanta gente interesada en el orbe. Resulta que es una Gema del Infinto capaz de destruir un planeta entero.



Una de las criadas del Coleccionista, el comprador (que se ha fijado en Groot porque no es una especie muy común), intentará quedarse con el tesoro. Sin embargo, lo que realmente conseguirá es liarla parda. Igual de parda que Drax, que en su afán por destruir a Ronan le ha llamado mientras los demás estaban con el Coleccionista.

Justo antes de que Ronan llegue, Peter y Gamora han conseguido recuperar la Gema e introducirla de nuevo en el orbe. Han acordado llevársela a Nova Prime para que la guarde a buen recaudo. Y, en estas, llega el malvado. Vamos a ser testigos de dos enfrentamientos paralelos. Por un lado, la huida de Rocket, Starlord y Gamora perseguidos por Nébula y otros secuaces y, por el otro lado, Ronan contra Drax. En el primero veremos cómo Peter y Gamora acaban en manos de Yondu, y a Nébula quedándose con el orbe que contiene la Gema. En el segundo, la actuación de Groot será crucial para Drax.



Llegados a este punto, tenemos a Gamora y StarLord con Yondu, Nébula se ha hecho con la Gema del Infinto y Rocket regresa donde estaban Groot y Drax para ponerles al día. Mientras estos tres deciden ir a rescatar a la parejita, esta entabla conversaciones para que Yondu y sus saqueadores se unan a su plan de salvar la galaxia de las manos de Ronan, que pretende destruir Xándar.


En esa alianza, obviamente todos tienen intereses ocultos. Todos, menos nuestros protagonistas, que han de enfrentarse directamente a Ronan no solo en una sino en dos ocasiones. En ambas, Peter será crucial.


Sin embargo, los planes no siempre salen como uno espera y, en este caso, no iba a ser menos. Groot es el imprescindible en esta ocasión pues protege a sus amigos y compañeros y es donde nos sorprende ampliando su escaso vocabulario.

Y ya para ir finalizando, os diré lo que me ha gustado de la película: TODO. El guión está muy currado y da varios giros a lo largo de la historia; los personajes tienen todos y cada uno su función y no se salen para nada de ella y los efectos especiales son brutales. No se puede esperar otra cosa viniendo de Marvel. Pero lo que más me ha gustado de todo es la música. Le da un punto ochentero a la película, a pesar de ser muy actual, bastante acertado. Y es que, bajo mi punto de vista, muestra a los más jóvenes (adolescentes, más concretamente, seguidores de los guardianes) que hay muchos más estilos musicales fuera del raeggeton y del techno-dance al que estamos tan malacostumbrados últimamente. ¿Hay algo que no me haya gustado? Sí, pero no puedo decir el qué (haría un spoiler a quien no la haya visto). Sin embargo este acontecimiento es necesario de cara a la segunda parte de la película, que reseñaré próximamente, y que comienza a desarrollarse en los títulos de crédito... No se os ocurra levantaros del sofá hasta el final del todo; si no, os perderéis algo muy divertido. Palabra.

Y, por cierto, si queréis otro punto de vista de este largometraje, no dudéis en ir vigilandoelcielo, pero sin olvidaros del sofá y la mantita.

¡Hasta la próxima peli!

4 comentarios:

  1. Vayaaa... Parece que la peli te ha gustado un poquito jejejeje...
    Una reseña muy acertada. Sin duda, creo que dieron en el blanco con la cinta y eso se nota en cada uno de los minutos del metraje. Si se lo montan ben (y creo que, desde luego, o están consiguiendo. Ahí queda la segunda parte como prueba), va a haber Guardianes siderales para rato.

    ¡A seguir así!

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  2. Pues sí, pues sí: me ha encantado. Muchas gracias 😁. Sí, parece ser que vamos a tener guardianes para rato porque he oído que puede haber hasta una cuarta película, pero con otros protas. De momento, esperaremos a la tercera.
    ¡Seguiré así! Jijiji

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  3. Muy buen resumen a mi me encantan los guardianes y la primera pelicula estuvo a la altura de cualquiera de marvel.

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  4. Muchas gracias, Jaime, por leerme y por el comentario. No dejes de leer y ver pelis.

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